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Viernes, 14 de junio 2024, 18:39
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Desde la Sección del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España- Extremadura, SPPME-EXTREMADURA, Ayuntamiento de Villafranca de los Barros, muestran su malestar, al alcalde, «por permitir que el Sr concejal de Personal y Régimen Interior, Joaquín Rodríguez Soler, haga públicamente al pueblo de Villafranca de los Barros declaraciones del todo inciertas».
Por ello, el sindicato aclara, en primer lugar, y dirigido a Rodríguez Soler, que son «un sindicato profesional de Policía Local a nivel nacional con más de 30 años, y que precisamente no puede dejar en entredicho la moralidad de este colectivo, máxime cuando a pesar de estar ejerciendo nuestra profesión día a día con unas circunstancias lamentables, seguimos volcándonos por la seguridad de la ciudadanía».
«Tenemos que aclararle que este sindicato supone casi el 90% de la plantilla del Cuerpo de la Policía Local, y que la Srª. Carmen Romero no es portavoz de este sindicato ni pertenece al mismo, como concejala de este Ayuntamiento tuvo la deferencia y el interés de solicitar a esta sección sindical una reunión para saber de primera mano, la problemática que afectaba a este colectivo y que le preocupaba, y así lo hicimos, al igual que lo haremos cuando el equipo de Gobierno quiera». «Son dos las solicitudes que por parte de esta sección se le ha trasladado a la Alcaldía hasta la fecha de hoy sin tener respuesta». Y añade, es «totalmente incierto que haya negociación, ni haya sido llamado este sindicato para la reunión del día 20 de junio».
Y corrobora las palabras de Carmen Romero cuando decía que a día de ayer los efectivos en activo y de servicio en la calle son 9, y 5 efectivos en tareas administrativas. «Evidentemente los policías en tareas administrativas no cuentan para el servicio».
Niega el sindicato rotundamente, por otro lado, que el motivo de estas bajas sea por tema económico. «El Sr. concejal al igual que el Sr. alcalde, saben perfectamente cual es el origen del problema y no es otro que el trato arbitrario e incongruente con el que nos sentimos tratado en la toma de decisiones y organización de esta plantilla».
Reitera este sindicato el trato desigual para los compañeros, de ejemplo menciona cuando «una compañera del cuerpo, solicitó un día por asuntos propios para la comunión de su hijo siendo negado por la Jefatura, pero en cambio a un policía con tareas administrativas, se le concedió 6 días, 3 antes y 3 después de la comunión de su hijo».
Ante este escenario y contexto, y «viendo la inoperancia e inactividad resolutiva del Sr. alcalde y del Sr concejal, de manera voluntaria los miembros de este cuerpo tomaron la decisión individual y de forma libre, de no realizar más horas extraordinarias a mediados de abril». Y que el «Sr. alcalde siendo consciente de que dichos servicios son de carácter voluntario por los funcionarios policiales, adoptó la tajante medida de dejar de abonarnos, sin previo aviso, el servicio de fines de semana, festivos y noches, que se venía abonando desde mayo del 2022».
En cuanto a las palabras de Rodríguez Soler, «las bajas serán legales, pero desde luego no son morales», responde, «las bajas médicas son firmadas por facultativos debidamente acreditados, no ponga usted en duda su profesionalidad. Los policías que se encuentran en situación de baja médica son por procesos de ansiedad y estrés laboral, provocados por la nefasta gestión de este cuerpo».
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