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Intervienen a Orel en el hospital de AMUS. CEDIDA
Orel, el águila imperial que sobrevivió a un disparo, muere electrocutada

Orel, el águila imperial que sobrevivió a un disparo, muere electrocutada

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Martes, 7 de febrero 2023, 19:26

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El 2 de febrero de 2022 ingresaba en el hospital de AMUS Orel, un ejemplar juvenil de Águila imperial tras ser disparado en la provincia de Badajoz. En la radiografía se contabilizaron cerca de cincuenta perdigones de plomo.

Fue intervenida de urgencia ya que presentaba las dos alas dañadas, además un ojo quedó perforado por una rama en su impacto contra el suelo perdiéndolo de manera irreversible. Fue liberada en julio de 2022 provista de un emisor GPS gracias a la cooperación con la DGS de la Junta de Extremadura. Su libertad fue efímera, en apenas siete meses fue hallada muerta por electrocución.

Así explica Amus la historia de Orel, quien se pregunta «cómo pueden seguir ocurriendo este tipo de sucesos». Profundiza a través de nota de prensa que España «goza de una buena normativa ambiental pero a pesar de este escudo normativo y legislativo la indefensión de las especies ante unas amenazas concretas siguen representando la gran asignatura pendiente». Y lamenta, «lo más sagrado, sensible y amenazado continúa sin estar asegurado: La fuga de biodiversidad es un hecho».

Según Amus «cada vez es más complejo salir indemne a tendidos eléctricos, venenos, disparos o parques eólicos, entre otros.

No hay datos ni estadísticas reales de la incidencia ni de las electrocuciones, ni de los disparos sobre especies de aves protegidas».

Se contabiliza solo lo que llega a los centros de recuperación o se detecta en el campo.

El caso de Orel, dicen, «no es único, es más que posible que a otros ejemplares de su especie les esté ocurriendo lo mismo; El Águila imperial, emblema de unos ecosistemas singulares que tienen sus últimos rincones aquí, en el sur de la península, de los que quedan apenas unas cincuenta parejas en Extremadura y no quieren vivir en otro lugar del mundo que no sea este».

Concluye el comunicado, «la responsabilidad no deja de pasar por asumir algo que cada día parece más irreparable y que es consecuencia de todos».

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