El Villafranca vence con apuros al Ribereña por 1-0 con gol de Pardino en el minuto 79

El Villafranca encontró en los instantes finales del partido contra la SP Ribereña el premio a su dominio durante prácticamente todo el encuentro, gracias a un pase medido de Mariñas que Pardino, en el minuto 79, no desaprovechó para batir al meta ribereño y quedarse con los tres puntos, tan necesitados para el equipo de Pacomio, que se desesperó con el árbitro en bastantes facetas del partido. El colegiado Andrés Byron Morales Veliz fua abroncado por los jugadores y el público villafranqueses, que le reclamaron un penalti en el área visitante.

Alrededor de 400 personas, muchas de ellas llegadas de la vecina localidad de Ribera del Fresno, se dieron cita esta mañana en el Polideportivo Municipal de Villafranca cuyo césped presentaba un magnífico aspecto y condiciones para la práctica del fútbol.

En la primera parte, con ambos equipos enteros, apenas hubo ocasiones de gol si exceptuamos la de Mariñas, cuyo disparo acabó repeliendo el larguero para desesperación de Pacomio, que veía como los fantasmas de pasados partidos volvían a estar presentes.

En la segunda mitad vimos a un Villafranca que no daba tregua a su rival, que se veía desbordado en defensa por el empuje de los atacantes villafranqueses. Sin embargo, faltaba el gol, y sobre el Villafranca se cernía el fatalismo si no conseguía marcar pronto por el temor a que el paso del tiempo sin goles envalentonara al equipo visitante.

Pero tanto va el cántaro a la fuente que acaba rompiéndose. Y eso es lo que pasó. Antes se había pedido penalti en el área del Ribereña, pero justo es decir que también se producían de forma esporádica peligrosos contragolpes del equipo rival.

Hasta que llegó el minuto 79, Mariñas cogió un balón en banda izquierda en la posición de extremo izquierdo y envió un balón envenenado al área, justo donde se encontraba Pardino esperando el pase, que aprovechó para batir al portero visitante en la misma línea de gol.

Alegría por todo lo alto en las filas villafranquesas y decepción en los visitantes que aspiraban incluso a la victoria. El gol hizo mella en el Ribereña y dio confianza a un Villafranca que nadaba y guardaba la ropa, pese a lo cual siguió disponiendo de ocasiones para ampliar el marcador.